martes, 9 de marzo de 2010

Llueve sobre mojado

Frío. Mucho frío.
Allá arriba, a lo lejos, un débil sol se deja ver por primera vez en tres meses. Pero no será durante mucho tiempo, sólo estaba de visita. Quizás no sea muy lejano el día en que venga para quedarse. Mientras tanto, levantamos la vista al cielo y agradecemos un descanso, una pausa. Un día sin acabar empapados, sin pasar mojados horas, sin tener que encerrarnos en casa.

Nos quejamos de la lluvia, de tantos meses sin parar de llover. Nos quejamos nosotros, quienes en realidad no tenemos derecho.

Muchísimas personas sí que sufren estas lluvias, porque éstas les arrebatan todo lo que tienen, todo. Sus casas, sus recuerdos, sus coches, sus formas de vida, su dinero....incluso en algunos casos, sus propias vidas. Esos sí tienen derecho a gritarle al cielo que ya basta, que pare de llover, que salga el sol de una vez para poder conservar lo poco que les queda, o para empezar de nuevo.

Así que quizás nosotros no deberíamos quejarnos...